Jorge Vilda despedido por el hembrismo de España

Muy triste la noticia que se acaba de confirmar hoy. España ha pasado de una dictadura con Franco, siendo un país muy machista a lo que parece es lo contrario, un país hembrista.

El falso feminismo, ya que feminismo en castellano (según la RAE) significa igualdad, ha conseguido otro logro en su cartera y esta vez aupado por el Gobierno e incluso internacionalmente se ha cobrado otra víctima solo por el hecho de ser hombre, Jorge Vilda, y más grave aún teniendo en cuenta que acaba de ganar el mundial de fútbol femenino, el mayor logro de la historia de la selección femenino además de otros grandes éxitos en categorías inferiores como director deportivo.

Osease que no importa su trabajo, lo que importa es que es hombre y ha aplaudido a Rubiales (incluso sacando comunicado pidiendo perdón y reprobando la actitud de Rubiales). Y lo peor es que esa caza de brujas del feminismo radical cada día parece que tiene una víctima nueva, ahora cualquiera que diga o haga algo en contra de una mujer es su objetivo. Eso sí, eso mismo lo hace una mujer y no pasa nada, no aplica el mismo criterio.

Ya se vio cómo atacaron en su día a Pablo Motos, cuando Mercedes Milá ha estado años y años haciendo lo mismo elevado a cinco y nunca ha tenido una crítica sobre ello. Pero es que la lista cada día se hace más grande.

Por no hablar de la cantidad de jugadores de fútbol denunciados falsamente por violación que se han llevado su lógica reprimenda aniquiladora del feminismo en redes sociales pese a que en los jucios han salido inocentes, vease el caso de Cristiano Ronaldo, Neymar, Mendy, y muchos otros.

Incluso en el caso de Dani Alves, donde algunas pruebas muestran que pudo haber consentimiento y que la víctima puede mentir en algunos detellas, directamente se le mete en la cárcel al jugador, se critica a muerte a cualquiera que ponga en dudas esas incoherencias de la víctima y a día de hoy el jugador sigue en la cárcel. Osease, en vez de denunciarle y esperar a un jucio justo, directamente se le condena y el feminismo radical lógicamente no espera ni al resultado del jucio, ya se le ha firmado sentencia de muerte en las redes, y si por algún casual acabase saliendo inocente en el juicio, ni una sola persona de esas le pedirá perdón, ni mucho menos, es más, les dará igual el resultado del juicio y dirán que son machistas los jueces o juezas (ya lo hacen de hecho en varios casos).

Lo curioso es que al revés no pasa. Cuando es una mujer la denunciada hay silencio o cuando es condenada por denuncia falta. Ya lo vimos con el juicio de Johnny Depp y Amber Heard, después de aniquilarlo públicamente a Johnny durante años y cargarse parte de su carrera, ¿cuántas/os de los que lo hicieron le pidieron perdón?.

Después de ser condenada Amber Heard qué críticas tuvo de parte del feminismo por haber mentido? Nada, de hecho la seguirán defendiendo, solo por el hecho de ser… mujer. ¿Eso es feminismo?.

El feminismo de verdad debería actuar igual, ya que es igualdad, sea una mujer o un hombre la víctima. Pero no pasa. El caso lo hemos visto también con Rubiales, si en vez de Luis Rubiales hubiese sido María Rubiales y el resto todo hubiese igual, se hubiese montado lo que se ha montado? No. Si en vez de Jorge Vilda se llamase María Vilda la hubiesen despedido hoy? No. Eso es lo triste y eso no es feminismo, es hembrismo.

El único consuelo es que Jorge Vilda se llevará indemnización buena y podrá denunciar a la RFEF por despido improcedente, además de que Rubiales verbalmente le prometió una subida tras el mundial, por lo que judicialmente tiene todas las de ganar, o no, porque ahora el hembrismo y el gobierno, últimante parece que quieren controlar también a los jueces y las leyes a su antojo, saltándose sin pudor la separación de poderes… Triste.

El fútbol femenino ha crecido mucho los últimos años y una de las razones, aunque casi ninguna lo reconozca, es precisamente por el apoyo de los hombres. Pero desde hace años llevan criminalizándo una y otra vez a los hombres dentro del fútbol femenino y hoy se ha cometido una injusticia muy grande, que puede hacer que parte de esos hombres que llevan apoyando años al fútbol femenino, se cansen del trato injusto a los hombres y dejen de defenderlo/verlo, tiempo al tiempo.